El CCRI-CG, comando supremo del EZLN, dice su palabra sobre la crisis actual del proceso de diálogo y negociación para una paz justa y digna en Chiapas:
Señores legisladores: Hace unos minutos, y a través de una transmisión radial, pude escuchar la respuesta de ustedes a la carta que, con fecha del 18 de mayo de 1996, les envié. Les agradezco que se hayan dignado responder y que lo hayan hecho con tanta celeridad. Eso habla de que su interés por solucionar la crisis actual no ha decaído.
A: La Sociedad Civil Nacional e Internacional.
Donde quiera que se encuentre.
Cumpliendo órdenes de nuestros jefes del CCRI-CG del EZLN, les escribo esta carta para responderles su mensaje y para hacerles saber las graves condiciones que existen en contra del proceso de diálogo, producto de las amenazas que hemos recibido de la Secretaría de Gobernación (a través de los señores Bernal y Del Valle).
En estos días difíciles para todos, hemos visto cómo nuestros compañeros zapatistas del FZLN han realizado una serie de acciones para exigir lo que es de verdad y justicia: el reconocimiento de que el EZLN no es terrorista y la libertad inmediata e incondicional de todos los presuntos zapatistas presos. Estos hermanos deben obtener su libertad en cualquier circunstancia: si no son zapatistas, entonces no tienen por qué estar presos; y si es que son zapatistas, entonces tampoco tienen por qué estar presos, porque hay un proceso de diálogo.
Por mi voz habla la voz del Ejército Zapatista de Liberación Nacional:
Este primero de mayo es un día de lucha de todos los trabajadores del campo y de la ciudad, es una lucha por hacernos oír. Nosotros, los no tomados en cuenta por los poderosos, tenemos que luchar porque nuestra palabra nos encuentre y pueda organizarnos. Organizados podemos mandar a que nos obedezcan, organizados podemos pedir cuentas de cómo se gastan los recursos públicos, organizados podemos exigir que nos informen cuál es el destino de las riquezas que producimos, organizados podemos decir cómo queremos vivir: sin explotación ni abusos de las autoridades.