7 DE ENERO DE 2006
A TOD@S L@S COMPAÑER@S DE LA OTRA CAMPAÑA
A LAS ORGANIZACIONES INDEPENDIENTES DE DERECHOS HUMANOS
A LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN INDEPENDIENTES
A LA SOCIEDAD CIVIL DE COLIMA
Los colectivos Uno de esos, de Colima y Caminar Preguntando de Jalisco, queremos hacer de su conocimiento la siguiente:
D E N U N C I A :
En pleno uso de nuestros derechos civiles de libre expresión, de libre transito y libre asociación. El día viernes 6 de enero de 2005, a las 23:30 horas aproximadamente, por la calle prof. Severo Campero de la colonia Gregorio Torres Quintero, en la ciudad de Colima, dos de nuestros compañeros, José Arnoldo Hinojosa Iglesias del “Colectivo Caminar Preguntando” y Alejandro Ponce Pérez del “Colectivo uno de esos”, se encontraban repartiendo propaganda de la Sexta Declaración de la Selva Lacandona y de la Otra Campaña; conversaban con cuatro jóvenes en una esquina, cuando pasaron dos patrullas de Seguridad Publica y en menos de 5 minutos regresaron tres camionetas con placas 0122, 0035, 0171 y un carro con placa 0055 además de miembros del grupo GADI, (que no alcanzaron a ver su numero de identificación pero entre ellos saben bien quienes son) llegaron con la anti constitucional “revisión de rutina”, de manera amenazante, provocadora y con mofa por la ropa que vestían los jóvenes, comenzaron a ordenar que todos se pusieran contra la caja de una de las camionetas, al argumentar que iban en contra de los derechos de los jóvenes, les dijeron que no se resistieran, que así era la revisión de rutina, que estaban implementando un operativo. “¿Qué es eso?” preguntaron refiriéndose a los volantes; los compañeros les respondieron que era parte de la difusión de la Sexta y la Otra Campaña; uno de ellos se quedo unos volantes, se los mostró a otro y le dijo: “es propaganda subversiva”.
Cuando se les preguntó el ¿porque? de la revisión, comenzaron a alzar la voz y del solo hecho de seguir preguntando ¿el porqué? y argumentar sus derechos civiles, los agentes sé pusieron irritables y nerviosos, nunca respondieron a ninguna pregunta, total, para no seguir perdiendo tiempo, nuestros compañeros se dejaron revisar, les pasaron “báscula”, como se dice en el barrio.
Luego a los otros cuatro jóvenes, quienes dicen estar acostumbrados a los malos tratos de la policía en su colonia y en todos lados, les ordenaron retirarse y a nuestros compañeros quedarse: “ustedes ya váyanse, ustedes se quedan, tú sigue recargado en la patrulla…”
Cuando apuntamos los números de las patrullas y le preguntamos a uno de ellos su nombre y su numero de placa, lo que al parecer le molesto, comenzó de nuevo a alzar la voz y a pedir nombres y direcciones e identificaciones y a preguntar retadoramente si querían presentar una denuncia, le dijeron que sí. Que entendían que los oficiales hicieran su trabajo, pero que no entendían, el trato, la actitud, la provocación y la forma en que “revisan” a las personas es ilegal. Entonces se acercó, al parecer uno de los encargados, con actitud altanera, prepotente, retadora, tratando de provocar, cuando le pidieron su nombre y su numero de placa, argumento que solo daba el nombre, si nuestros compañeros se identificaban y comenzó a interrogarlos, sobre quienes eran, donde habían nacido, que edades tenían, en donde vivían y que les explicaran el contenido de la propaganda.
Nuestros compañeros no contestaron a nada, solo hablaron amparándose en sus derechos constitucionales, 1, 7, 9, 11 y 16 y que leyeran ellos mismos la propaganda para que se enterasen del tema, todo esto fue motivo de risa para los agentes, que la realidad es otra pues para ellos la constitución, es una leyenda, ilusoria y de fantasía; ¿y eso que? Contestaron con burla, por lo que les recordaron que somos los ciudadanos, quienes con las contribuciones de nuestros impuestos, les pagamos, el sueldo, el uniforme, la patrulla, las camionetas y todas las balas que se cargan y que cada una puede significar una vida. Además del entrenamiento del perro, el de ellos, la pistola, la gorra, la plaquita, los anuncios espectaculares en la ciudad, las motos, los chalecos, las botas con las que patean y las macanas con las que “hacen cumplir la ley”. O sea que como quien dice, los ciudadanos costean su represión.
Este agente pidió, que se demostrara que los ciudadanos le pagan el sueldo, ¿Dónde están los recibos de que me mantienen? Pregunto quien nunca se quiso identificar, Nosotros somos la ley – y agrego en el tono mas prepotente – somos la autorida´
Otro policía negó rotundamente que fuera cierto que su sueldo viene de los ciudadanos, además de seguir preguntando ¿y eso qué con la constitución?
Ya para terminar les ordenaron que se retiraran del lugar, a lo que les respondieron que no. Entonces el que parecía ser el jefe, o al menos era el más prepotente y agresivo de todos dijo: “está bien, quédense, al fin que nuestras son las calles”.
Ninguno de los agentes se quiso identificar, tampoco comprobaron si sabían leer o no, pues insistieron de forma ajerosa en que se les explicara el contenido de la propaganda, ya que no lo podían hacer por ellos mismos. Se ocuparon en desvirtuar la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos así como su desconocimiento expresado verbalmente, si niegan lo contrario, que es muy posible, MIENTEN.
Creemos que aun entre los policías, puede haber gente honesta y que da buen trato, que trabaja para los suyos y evitan perjudicar y mejor ayudan a los demás, que cumplen con su trabajo de Servidores Públicos, que a algunos los mandan a la escuela, algunos, pocos, estudiaran, otros muchos se esfuerzan por demostrar lo contrario, que en cuanto ven letras impresas, en lugar de comprenderlas, las criminalizan. Es cierto que los policías arriesgan la vida, pero algunos se creen protagonistas de un cuento de vaqueros con sandalias, bajando gatitos de los árboles; pues otra verdad, es, que en Colima, es muy sabido que muchas veces, cuando a la policía se le ha necesitado para una urgencia, llegaron tarde…..si se tratado de agarrar a muchos, nunca hay refuerzos y si se trata de agarrar a una sola persona….¡espectacularmente todos en vil manada que para morir como valientes nacieron! Y porque así lo dicta su entrenamiento. Sabemos y estamos claros que ellos solos obedecen y forman parte del aparato represivo del estado, que su actuar provocador es para que los jóvenes reaccionen ante el maltrato psicológico e intenten agredirlos, para ellos, poder vapulearlos y justificar su trabajo de “aplicar la ley”, cumplir su horario de trabajo y asegurar un pago mas en la quincena que necesitan para poder vivir.
P O R T A N T O :
De que los malos gobiernos en nuestro país, cada vez se distancian mas de los pueblos y desconocen la Constitución, pisotean los derechos de los ciudadanos y hacen del abuso de poder su practica y actitud diaria.
Para el represivo control de la gente, Criminalizan todo lo que se les antoje, estorbe, o que les sirva o no para sus negocios, Criminalizan la Pobreza, “vives en barrio pobre, por lo tanto eres posible delincuente”, Criminalizan la Juventud, “Te vistes de tal o cual forma, o no te alcanza para andar bien vestido, te juntas con varios en la calle, caminas en la noche a tu casa, por lo tanto eres posible delincuente”, Criminalizan la Diferencia y los modos de ser, “Eres indio, homosexual, trabajadora sexual, o inmigrante, por lo tanto eres posible delincuente”, Criminalizan el Libre Pensamiento, “Propaganda con fotos de un zapatista cargando a su hijo en hombros, por lo tanto eres posible delincuente”
I N V I T A M O S
A toda la sociedad de civil de Colima, a los jóvenes, al barrio, a la banda, a la palomilla, a la pandilla, a la raza de las esquinas, a los compas que no tienen espacios propios y que el mal gobierno se ha olvidado de ellos, a todos los apañados y tratados injusta, indignamente e ilegalmente en las “revisiones de rutina”, a que denuncien y se pronuncien en contra del mal trato represivo por parte de cualquiera de los cuerpos policíacos, solos, nos perdemos en el silencio, pero juntas nuestras voces pueden lograr lo imposible, como recordarles a los dizque servidores públicos, quien los mantiene y que por lo tanto traten mejor a la población, que tarde que temprano se puede cansar…
A todos los compañeros adherentes a la Sexta Declaración de la Selva Lacandona y que participan en la Otra Campaña a pronunciarse en contra de todo acto de represión y denunciar cualquier tipo de amenazas, agresiones, físicas, verbales, psicológicas y morales, por parte del mal gobierno. Porque desde ahora No podemos quedarnos callados en este esfuerzo nacional que ha hecho suyo muchos mexicanos y que sueñan, viven y luchan por el.
Pd. Insistente, al mal gobierno, todos los funcionarios y “servidores públicos”, viajes, giras, toallas, fiestas, autos, comidas lujosas, casas, vacaciones, sueldos y aguinaldos, SE LAS PAGA EL PUEBLO.
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Comentario de vigilantedelaniebla — enero 24, 2006 @ 12:42 am