Discurso del Comandante Tacho en el Instituto Politécnico Nacional.
Viernes 16 de marzo de 2001
Hermanos y hermanas de la sociedad civil.
A los hermanos y hermanas de la comunidad del Politécnico.
El día de hoy queremos decirles que la sociedad civil del pueblo de México y el mundo tiene la misma necesidad también de luchar para tener una vida digna para tener una democracia con libertad y justicia. También queremos decirles que la necesidad de luchar por la defensa de nuestros derechos políticos, económicos, sociales y culturales no la podemos esperar solos y sin la participación de todos y todas juntos. Sólo así creemos que los podemos conseguir lo que nuestro país necesita.
Por eso, hermanos de la sociedad civil, luchemos juntos para que juntos podamos conseguir el derecho de los pueblos indios de México.
Nosotros también sabemos que hay muchas otras demandas también necesarias, pero el camino para empezar es el reconocimiento en la Constitución mexicana de los derechos y cultura indígenas. Sin ese reconocimiento es imposible que en este país se nos respeten nuestros derechos, los que hoy se nombran ser los gobierno nos siguen demostrando lo prepotentes que son con sus soberbias maneras de actuar frente al gran pueblo de México que nos hemos encontrado. A lo largo de estos últimos años, esa sociedad civil que se ha multiplicado como las estrellas del cielo, esos que acompañan para el nuevo amanecer de quienes hemos tomado el color de aquellos que amanecimos en una madrugada sin rostro, sin nombre, son ellos y ellas. En el corazón de ustedes, somos nosotros ustedes hermanos y hermanas.
Estamos demostrando que somos capaces, que juntos vamos a hacer un nuevo país, el que queremos los del México de abajo, el pueblo que por muchos años ha luchado para conseguir mejores condiciones de vida, buscando el reconocimiento al derecho que le corresponde.
Hermanas y hermanos de la sociedad civil, a la comunidad de Politécnico: los malos gobernantes que dicen gobernar en nuestro país, ellos sembraron la desconfianza porque cuando reclamamos nuestros derechos la respuesta fue el encarcelamiento, la persecución, la amenaza, la tortura, el asesinato y la desaparición. Esas fueron sus respuestas y hoy también siguen demostrando esas actitudes. Ustedes lo saben bien y nosotros lo vemos. Cuando el pueblo se manifiesta a defender sus derechos otra vez ponen en frente del pueblo mexicano a granaderos para reprimir o amenazarnos, a la Policía Federal Preventiva y a granaderos para intimidar y humillar a nuestro pueblo en la ciudad. Ustedes sufren como nosotros.
La historia ha demostrado que la memoria de nuestro pueblo está estampada en el fondo de los corazones de esta gran sociedad civil. ¿Quién le puede confiar al que enfrente los pone los represores? ¿Quién le puede confiar al que nos ha engañado? ¿Quién puede creer las palabras huecas y vanas que nos hablan? ¿Quién puede creer las puras palabras que nos hablan y que no lo demuestran los hechos?
Hermanos y hermanas de la sociedad civil: nosotros, el pueblo mexicano, no queremos sólo palabras, queremos que se nos dé respuesta a nuestras justas demandas con los hechos, a tener una vida digna y más humana. Esto es lo que queremos el pueblo de México, basados en el derecho que nos corresponde. Por eso luchamos, por eso es necesario que todos juntos luchemos porque sólo así tendremos una paz justa y digna. Para el pueblo de México es indispensable el reconocimiento de nuestros derechos, basado en la justicia, la libertad y la democracia.
Comité Clandestino Revolucionario Indígena.
Comandancia General del Ejército Zapatista de Liberación Nacional
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