SEMINARIO INTERNACIONAL DE REFLEXIÓN Y ANÁLISIS
Bárbara Zamora
En el marco jurídico nacional y en la legislación internacional, se han establecido derechos para todos los seres humanos entre los cuales está el derecho a la justicia; justicia que debe ser impartida por tribunales independientes cuyas resoluciones deben emitirse de manera pronta, completa, imparcial y gratuita por jueces independientes e imparciales.
Este derecho a la justicia se encuentra establecido en el artículo 17 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; el artículo 10 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos; el artículo 14.1 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos; el artículo XVIII de la Declaración Americana sobre Derechos y Deberes del hombre; el artículo 8.1 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos.
A pesar de lo que ordenan estas legislaciones tanto nacionales como internacionales, lo que ocurre en la realidad es algo totalmente diferente y no tiene nada que ver con el ideal de justicia que señalan estos instrumentos jurídicos.
El problema esencial es que la justicia ya no está dirigida a restablecer la armonía, quizá porque en nuestra época ya no tenemos una idea de lo que significa el Orden y la Armonía.
La justicia y su aplicación están íntimamente ligadas a la noción de delito. De aquello que los hombres consideran un delito, podemos hacernos una idea de lo que es la justicia para un grupo de hombres o para una sociedad.
Es evidente que hoy ya no se legisla para tratar de mantener el orden del mundo, el difícil equilibrio que rige todas las cosas, sino para restablecer o proteger los intereses y los valores que han pactado un grupo de hombres o una sociedad.
Cuando un delito es abolido significa que esa sociedad ya no reconoce en él una transgresión a sus valores o a los fundamentos que tejen sus estructuras, sus instituciones o sus intereses. Si un delito es abolido significa que ya no atenta contra el equilibrio de la sociedad, pues ese equilibrio se ha desplazado hacia otros lugares.
Por ejemplo, se suprimen delitos como el adulterio y la difamación; en cambio se tipifica como conducta delictiva el reclamo de un derecho calificándola como terrorismo, creando estados de excepción donde todos los derechos y libertades están limitados, condicionados o anulados por la violencia de las fuerzas militares y policiales.
La gran similitud de la reforma constitucional penal mexicana con la ley antiterrorista española y la ley patriótica de Estados Unidos, nos demuestra que las leyes se globalizan y obedecen a los intereses de los gobiernos.
Es por ello que ya no reconocemos a las instituciones judiciales de nuestro país o del mundo, porque ya no nos reconocemos en el orden que nos proponen, en los hilos que tejen la comunidad de la que pretenden hacernos parte. Esa justicia es ilegitima porque el tipo de universo que protege no es el que nosotros hemos imaginado, ni el que nosotros hemos pactado.
La justicia es impuesta y aplicada por aquellos que tienen el poder, es el reflejo del mundo tal y como ellos lo conciben. Esta es la razón por la que una gran mayoría de la población, la más pobre, siempre se ha sentido excluida o atacada por esa justicia, pues en el orden del mundo que ésta trata de proteger, ellos están ausentes, o son considerados como enemigos. Las penas y los castigos están destinados a conservar una estructura social; son un procedimiento, un mecanismo político, para mantener el orden impuesto desde el poder.
En suma, en los tribunales no se administra justicia, solo se aplican las leyes y además se hace de manera discrecional y con criterios políticos. Ejemplos de ellos tenemos muchos: los mineros de Pasta de Conchos, los colonos de Lomas del Poleo, los presos de Atenco, los muertos y los presos de Oaxaca, los mineros de Cananea, los electricistas del SME, los niños quemados en la guardería de Sonora, las familias asesinadas por los militares en los retenes, los ejidatarios de San Pedro Tultepec, los comuneros de San Miguel Xoltepec, la comunidad de Santa Cruz Atizapán, la comunidad de San Agustín, el ejido Playa Limón. los comuneros de Ocotepec.
Esta comunidad de Ocotepec, hizo valer su derecho a elegir sus autoridades internas como es el comisariado de bienes comunales mediante usos y costumbres, como lo había venido haciendo siempre; sin embargo, con una resolución ignominiosa y cantinflesca, la Suprema Corte de Justicia de la Nación, determinó que esta actividad, es decir la de elegir a su comisariado “no puede formar parte del ejercicio de libre determinación de las comunidades indígenas, ya que en caso de realizar tales actividades las comunidades indígenas, se correría el riesgo de quebrantar la unidad nacional”
Por todas estas razones es que ahora debemos hablar de una nueva justicia y primero tenemos que interrogarnos sobre la experiencia política que debe sustentarla ¿Qué es una experiencia política? Es la experiencia del vínculo entre los hombres, un vínculo que crea una comunidad entre ellos. La dimensión y la profundidad política de una sociedad están íntimamente relacionadas con el tipo de vínculo que han establecido los hombres que la conforman.
Hay que preguntarnos, ¿cuál es el vínculo que hoy nos une como sociedad? ¿cuál es la expresión de nuestra experiencia política? Probablemente no existe. No son sin duda, las elecciones. No son las leyes que hoy rigen al país. No es, como quieren hacernos creer, el combate a la delincuencia organizada o al terrorismo. El vínculo que había ente nosotros se ha roto y, al romperse, se anuló toda posibilidad de justicia.
Después de la Revolución mexicana, nuestro vínculo fue la Constitución de 1917. Es decir, nuestra experiencia política y, con ello, nuestra experiencia de la justicia, estaba fundada en este libro, en la palabra. Hoy esa Constitución ya no existe. Y aún, si existiera. Ya no sería lo suficientemente fuerte para renovar los vínculos que se han roto entre nosotros.
En el caos que hoy se ha instaurado, debemos imaginar nuevos vínculos entre nosotros. Tal vez necesitamos algo más que una revolución, porque una revolución solo sirve para derrocar temporalmente a una persona o a un gobierno.
Pero nuestra revolución debe servir para forjar una nueva armonía, para imaginar y construir los vínculos políticos sobre los que se tejerá la nueva sociedad que nazca de ella.
Una revolución cuyo único objetivo sea derrotar al poder en turno, forjará una experiencia política basada en la persecución, en la sangre y en el terror. Y ese será el tipo de relación que establecerán los hombres nacidos de ese movimiento político extremo.
Un universo en fragmentos, como el nuestro, es decir un universo donde la experiencia política entre los individuos de una comunidad se ha roto, es un lugar donde la relación entre el hombre y su lengua también se ha hecho pedazos. Por que la justicia es el cuidado de ese vínculo ligerísimo que une todas las cosas del universo, y que ante todo- une las palabras, los actos y los hombres.
¿Qué es una nueva justicia? Quizá no deberíamos buscar una nueva justicia, sino la reparación de los vínculos que la justicia se encargaba de proteger y de mantener unidos.
Ahora nos enfrentamos a una doble tarea. Crear un nuevo vínculo entre nosotros –una experiencia política de otro orden- y crear una nueva forma de protegerla.
No podemos imaginar la forma de proteger el vínculo que nos teje a nosotros como comunidad o como país, es decir, no podemos imaginar una nueva justicia, si antes no hemos forjado un nuevo vínculo.
El sueño de una nueva justicia se sostiene sobre la fe en ese sueño. Si no es un sueño colectivo, si no es un sueño que penetre los párpados de todos, el despertar seguirá siendo sangriento. Porque ¿cómo proteger un sueño que no compartimos? Habrá que soñar una justicia que no pase por los castigos físicos, ni por las prisiones, ni por la pena de muerte, ni por la confinación en centros de higiene pública, ni por la condena de los instintos o de los deseos.
Sin embargo, tal vez, un nuevo vínculo ha nacido entre nosotros y ese vínculo –que une a personas que hablan distintas lenguas, de diversos países, de culturas diferentes, personas que aparentemente nada comparte- es la palabra del Ejército Zapatista de Liberación Nacional. Una palabra que no destruye, sino que a su paso va curando todas las heridas del mundo, recogiendo cada fragmento hasta reparar –con esa nueva violencia- todos los vínculos que el hombre ha olvidado o ha destruido.
Seguir llenando el lenguaje de lamentos es destruir el delicado vínculo que ahora nos convoca y que, quizá, nos une.
Como ha hecho el EZLN, como hacen los verdaderos poetas, nosotros tenemos que transformarnos en palabras, y así, como en los altos poemas, combatir alegremente. Y también imaginar una nueva violencia, una violencia que cuide de la vida, para que nuestro sueño no se evapore en medio de una noche de sangre.
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¡¡¡Estamos Unidos Hermanos!!! Vamos por un Mexico Despierto, es el momento, es el tiempo, la gente del pais espera, nuestro pueblo esta esperando una señal, la gente quiere revolucion, por sus hijos, por sus padres y sus hermanos, por su tierra y por la libertad… Este es el inicio de nuestra Revolucion, no solo en México si no en el mundo entero. Hagamos juntos la Nueva Revolucion, «La Revolucion de la Conciencia»… Unidos traeremos ese tiempo de paz, armonia y justicia, por que ya es tiempo.
Comentario de Allenus Salgado — marzo 3, 2010 @ 12:14 pm
saludos compas desde asqui la frontera con colombia en la bolivariana
republica de venezuela….. seguimos como ustedes abjo y a la izquierda….
asta la victoria siempre…..
estamos venciendo…
Comentario de virgilio Parra — mayo 15, 2010 @ 3:33 pm
no nos olvidemos en esta larga noche, es hora de despertar y vernos cara acara, vamos con la fe envuelta en razon, enunciando palabra por palabra nuestra historia y el resgarro de nuestros hermanos que cayeron viendo al sol por esta tierra y esta fe que nos hacen ser mexicanos. viva zapata, viva nuestra historia
Comentario de joao hdz — mayo 16, 2010 @ 6:56 pm
la pugna por una igualdad entre los hombres se ha llegado ha catalogar hoy en dia como una incentiva hacia la violencia, solo por reclamar algo que por el simple hecho de constituirnos como seres humanos nos pertenece.
hace falta una mentalidad abierta a la lucha por la liberacion, pues solo hacia con educacion e ideales bien simentados es posible llegar a la victoria de una convivencia, pasifica, armonica. en donde se cumplan los fines de un derecho. justicia, igualdad y bien comùn.
hasta la victoria!
Comentario de SISA — mayo 26, 2010 @ 12:30 am
denocracia…….ibertad……justicia……. apoyo toda mente que haga conciencia sobre esto….. en especal….. Subcomandante Marcos……… eres increiblemente, ojala un dia todos crean en tus palabras… respeto por ti.
Comentario de fernanda silveira — junio 17, 2010 @ 1:46 pm
Me alegra mucho saver que la guerra por la justicia continua, pertenesco a la clase baja y ya estoy arto de que unos cuantos tipos se crean los dueños del mundo gracias a este sistema de esclabizacion y deshumanizacion, nuestros gobernantes nos venden a los grandes empresarios internacionales permitiendo que introduscan porquerias a nuestro mercado y exploten nuestros recursos naturales y nuestra mano de obra, creando asi una esclabizacion indirecta. Yo tambien me estoy preparando para un dia poderme unir a esta lucha. Arriva el Marxismo y el EZLN.
Comentario de Luis Gerardo — julio 4, 2010 @ 10:56 pm
Hola.
Espero y esten bien.
Saben al leer este artículo, senti la emosión de comunicarme con mi esposo, tal vez suene a … lo que quieran pero en esa sus palabras de Barbara encontre el mensaje que todos los días ando buscando
«Pero nuestra revolución debe servir para forjar una nueva armonía, para imaginar y construir los vínculos políticos sobre los que se tejerá la nueva sociedad que nazca de ella
El sueño de una nueva justicia se sostiene sobre la fe en ese sueño. Si no es un sueño colectivo, si no es un sueño que penetre los párpados de todos, el despertar seguirá siendo sangriento. Porque ¿cómo proteger un sueño que no compartimos? Habrá que soñar una justicia que no pase por los castigos físicos, ni por las prisiones, ni por la pena de muerte, ni por la confinación en centros de higiene pública, ni por la condena de los instintos o de los deseos.»
En esas sus palabras Barbara revivi, e intento objetivar el motivo que me dejo mi esposo, trabajar por un sueño regresar a sus raices fortalecerlas y revivir el sentido de la justicia y dignidad de ese lugar el más pobre donde nacio,convivir con esa a la que llamo su gente, promover la unión y el trabajo colectivo con esa alegría característica de Antonio Cárdenas y que muchas veces en el camino uno se equivoca.
Ese articulo solo me hace sentir que estos idealistas que buscamos un mundo mejor donde aprendamos a sconvivir en armonia, sentido de justicia y dignidad se continuen fortaleciendo porque es y seguira siendo la esperanza de tener un mundo mejor desde el pequeño bastion donde nos toque vivir.
desde el Ejido Francisco Medrano La higuerilla en Tula Tamaulipas
Les envio un saludo
Solo una mujer, una compañera hermana y esposa que extraña mucho la comunión con su amado esposo
Antonio Cardenas Jimenez que en paz descana
Comentario de Trabajando por un sueño — julio 12, 2010 @ 11:25 am
io kreo ke lo ke nezezita esta soziedad,es alguen en kien kreer i konfiar. i sinzeramente enkontre en las palabraz de marcoz i en todo el EZLN la ezperanza ke nos falta. marcos i toda la reziztenzia rojinegra, son la voz de muchos de nosotros. un saludo i toda la vibra positiva para mis hermanoz de la tierra zapatista. paz.
¡¡¡zapata vive, la lucha sigue!!!
¡¡¡tierra y libertad!!!
Comentario de luis ivan (19 años) — agosto 8, 2010 @ 12:07 am
estamos con ustedes juntos revueltos reveldes………miles de revoluciones
mexico resiste
mexico revelde
http://myspace.com/nacionrock
Comentario de jakye nacion — agosto 13, 2010 @ 8:31 am
Interesante artículo, lo que aquí resalta sobre la justicia en el sentido de que sea con la finalidad de mantener la armonía y que los vínculos entre quienes habitan en un espacio vital (territorio) que va de lo local, regional, etatal a lo nacional no sea roto, además del sentido que se la ha dado a lo delictivo, me parece fundamental para repensar un país donde se ha fracturado la paz social por el grupo en el poder. Lo que sigue, es una ardua tarea por restablecer el sentido de justicia planteado, para poder reconstituir el tejido social.
Isaac
Comentario de Isaac Angeles — agosto 14, 2010 @ 10:06 am
no ps aki nose les olvide ke en oaxaca los jovenes los apoyan ,no se cientan solos.
Comentario de TIMOTEO — agosto 27, 2010 @ 10:28 pm
muy bueno el articulo cada vez mas HERMANOS MEXICANOS se estan quitando las bendas de los ojos gracias a revolucionarios del pensamiento como EZLN en mi caso estoy totalmente en solidaridad con el movimiento ya saben SIEMPRE FUERTES abajo y ala izquierda estoy ORGULLOSO de ser MEXICANO prefiero morir de pie que vivir una vida de rodillas.GRACIAS POR RESISTIR Y ABRIR MENTES!!!!!!!!!!!!
Comentario de chucho — septiembre 2, 2010 @ 12:09 am
Saludos a todos los que viven en resistencia, no dejemos de luchar por un mundo mejor! Viva el EZLN! Viva Zapata!
Comentario de Patricia — septiembre 4, 2010 @ 11:39 pm
viva la vida
viva el derecho a esuchar
viva el derecho a ser escuchado
viva el derecho a la dignidag
viva el derecho a democracia
viva el derecho de la equidad
viva el derecho a la igualdad
viva el derecho hacer nosotros mismos
viva el derecho a morir por nuestra libertad
a qui esta un soldado mas
Comentario de emanuel — septiembre 7, 2010 @ 2:26 pm
lo q falta es convocar a la banda q en verdad qiere hacer algo por cambiar este maldito sistema y q no todo se quede en palabras,donde sea que la muerte nos sorprenda bienvenida sea, mientras nuestro grito de guerra sea escuchado
Comentario de xxxxxxx — septiembre 26, 2010 @ 9:13 pm
Un saludo a todos compañeros, desde España, comentando que aqui sigue la prensa amarillista atacando al ezln cada vez que puede, resulta que la gente ignora realmente la realidad vivida en nuestro pais y no ven en el movimiento, la solucion a los problemas patrios, pero como bien sabemos son parte de el poder oculto que ejercen los politicos asecinos ladrones y corruptos de nuestra nacion para que las noticias reales no sean publicadas fuera de nuestras fronteras… eso si cuando logran alguna captura de algun narco la hacen saber a bombo y platillo por todo el mundo pero sus abusos nunca los dan a conocer… siempre combatientes Zapatistas.
Comentario de Marco Antonio — septiembre 28, 2010 @ 6:38 am
soy un estudiante del colegio de bachilleres 13
y algunos amigos nos hemos reunido
pues coincidimos en algunas ideas
difundidas por
el subcomandante marcos
y por este medio
estamos
para cualkier cosa
en ke se necesite gente y es el momento de
empezar desde abajo
para
ke en verdad se libere mexico de sus presidente
corrupto y su administracion de ratas
el bachilleres 13
esta con el
EZLN
Comentario de MARCOS — octubre 3, 2010 @ 2:17 pm
estoy compleamente de acuerdo con sus ideales, a hacer un nuevo mexico, un mexico que no queremos ver como este para nuestros hijos, ver en realidad por la gente pobre y necesitada por una mejor educacion en mexico, nuestro pais nesesita este tipo de gente que tenga corazon sensible para los pobres y no para hacer riquezas para su propio beneficio
Comentario de ENRIQUE MORALES RUIZ — enero 2, 2011 @ 5:47 pm
Al leer tu artículo, la palabra del EZLN me ayuda a pensar con optimismo pero que solo ha de lograrse con lucha y esfuerzo y el compromiso de quienes creemos en estas palabras y en todo lo que el EZLN ha logrado.
El caminar no esta exento de tumbos pero siempre nos levantamos. Gracias!!!, todo mi apoyo desde La Plata, pcia de Buenos Aires, Argentina. Un nuevo mundo para Mexico, America y el mundo.
Comentario de Rolando — febrero 8, 2013 @ 7:06 pm
Realmente veo reflejado todo mi sentir y mi pensar en estas pàlabras, y gracias, porque ya no me siento tan sóla, en esto de andar la justicia, que por ahora la hicieron los de arriba para los de arriba, cuando los beneficia, pero las sanciones, sólo son para los de abajo. Y si que en esta modalidad, no hay fronteras, Argentina, claro ejemplo.
Un abrazo!!!! Adriana
Comentario de adriana estela maggio — abril 23, 2013 @ 4:46 pm
Excelente articulo, me puso a pensar en eso de la justicia que donde quiera es lo mismo y en lo del vínculo, creo que tenemos que trabajar juntos/as en esa dirección en cualquier lugar que estemos porque es de la única forma que podremos alcanzar los objetivos que nos propongamos. Adelante EZLN!!!!
Comentario de Mabel Lopez Zapata — abril 23, 2013 @ 5:14 pm
Me gustaria profundizar en este tema, soy meztizo del territorio de IXIMULEW (Tierra del Maiz, mas conocida como Guatemala. Me interesa mucho este articulo, si tiene algo mas que profundizar en relacion a: El Estado de Derecho, en el que nos han encajonado, para legislar y hacer justicia en favor de intereses oligarquicos y transnacionales. Aqui estamos padeciendo la CRIMINALIZACION DE LA LUCHA SOCIAL, precisamente por esas leyes que se supeditaron a la imposicion de la LEY PATRIOTA y su evolucion en otros paises. Hoy la tenemos aqui, como un instrumento para reprimir, para instaurar Estados de Sitio, Estado de Prevencion, persecusión penal, criminalizacion, agradecere mucho su apoyo. Formo parte de un equipo de formacion politica,desde el enfoque de Educacion Popular y Concepcion Metodologica Dialectica, saludos y hasta pronto
Comentario de Victor Manuel Cute Rojas — mayo 15, 2013 @ 8:56 am